Sandra está en Alemania para presentar un libro sobre la fotonovela. En las noches frías en el hotel donde se hospeda, los recuerdos se van desgranando, lo que la hacen resignificar su existencia junto a un entrevistador con preguntas sobre la existencia y los modos de vinculación con la realidad. “Los besos del lago” es la obra escrita y dirigida por Alberto Moreno que llegará desde Catamarca esta noche, a las 22, a La Sodería (Juan Posse 1.141), con las actuaciones de María Pessacq, Ignacio Haber Ahumada y Gualter Lou.
“La obra recorre los recuerdos de una escritora que debe tomar decisiones en torno a su libro y su vida. Ese plano entra en diálogo con el mito de Narciso, presentado con otras modalidades expresivas como las canciones y la danza, y juega con una doble tensión entre la dimensión individual y la social del narcisismo, en tanto condición existencial contemporánea”, dice Moreno.
“A partir del beso de Narciso con el lago se van tramando una serie de besos que van desde aquellos primeros hasta los míticos de la cultura de masas, del de Judas a los de las madres, con lo que se exploran las imágenes, la música y el lenguaje poético”, añade para LA GACETA.
El autor reivindica a “la fotonovela como un elemento argumental para pensar la vinculación conflictiva entre una construcción de la existencia a través de las imágenes y la realidad; lo que queda descartado entre foto y foto comienza a filtrarse y nos hace preguntarnos sobre cómo construimos nuestras subjetividades”. A diferencia de otras puestas con su grupo La Corredera, esta obra juega con la intimidad y el minimalismo. “Ambientarla en otro lugar nos permitió una distancia para poder ver nuestras territorialidades que están atravesadas por fuertes conflictividades”, reconoce.